Las tradicionales amalgamas metálicas – de metal con Mercurio-, actualmente son reemplazadas por obturaciones de cerámica, composites y también ionómeros, por su mayor belleza.

Complementan la estética oral, las carillas y fundas de porcelana. Ideales para piezas manchadas, mal posicionadas, cariadas o mal restauradas.

El blanqueamiento también contribuye a estos fines y puede realizarse en forma intensiva en una pieza o bien en toda la dentadura.

Las intervenciones quirúrgicas más comunes son la exodoncia de molares del juicio, apicectomías, quistectomías, frenectomías e instalación de implantes de titanio.

Estos tratamientos se realizan respetando estrictamente las normas de asepsia, esterilización y protocolos del Ministerio de Salud. Los controles postquirúrgicos son esenciales y obligatorios.

La salud de las encías y del hueso es primordial para la buena retención de las piezas dentarías, evitando su temprana pérdida. En los tratamientos de periodoncia se realizan acciones como limpiezas dentales, detartrajes, pulidos radiculares y profilaxis en general. Además, el profesional enseña sobre medidas de prevención y técnicas de higiene oral. Así se combaten problemas como sangramiento de encías, dientes sueltos, sensibilidad, retracción de encía.

Se trata de la eliminación de la pulpa dentaria para reemplazarla por un material aséptico.
Actualmente los tratamientos de conducto los realiza el especialista en breve tiempo, tomando generalmente una a dos sesiones. A diferencia de lo que se cree comúnmente, estas intervenciones son prácticamente indoloras gracias a las nuevas técnicas y materiales.

Son dientes de porcelana que van firmemente unidos a los dientes remanentes por distintos medios y no se pueden quitar por el paciente. Van puestos sobre la raíz o sobre un implante (que reemplaza la función de la raíz). No utilizan ganchos ni artificios que se vean o sientan, siendo indetectables al ojo común.

Son prótesis, de dentaduras completas o parciales, que se pueden quitar y poner en la boca por el mismo paciente, especialmente para su higiene.

La salud bucal de los niños es muy importante. Las primeras visitas al dentista permiten detectar anomalías de forma precoz y el niño se desensibiliza con lo que se evitan traumas psicológicos futuros respecto de la atención odontológica. A su vez, es de gran importancia evaluar, realizar restauraciones, detectar caries, necesidad de sellantes, fluoraciones, higiene u ortodoncia.

Realizamos procedimientos convencionales, con brakets metálicos y cerámicos. Estos últimos son ideales para personas que prefieren tener una mejor estética durante el tratamiento.